No sabía que escribir, hasta que se me ocurrió escribir un pequeño fragmento de mi infacia.
Todo empezó cuando tenía aproximadamente 7 años.
Mi hermano y actualmente mi cuñada, decidieron casarse en Colima. Cuando llegamos al hotel, nos hospedamos y fue buena la primera impresión. Pero lo que más me sorprendió fue que tenían una alberca.
Entonces, decidí caminar junto con mi hermana alrededor de la alberca, mi hermano me advirtió que me caería, yo no hice caso y seguí haciendo lo mismo.
Perdí el equilibrio y caí.
No sabía nadar, mi hermano reaccionó rápidamente y me sacó con una mano, yo estaba llorando.
Desde ese momento, desarrollé por cierto tiempo una pequeña fobia a las albercas.
Cambiando rápidamente de tema, te recuerdo que ya está disponible la repetición de mi programa de radio, "Música sin límites" en la siguiente liga.
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